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SERUM 5 EN 1

SERUM 5 EN 1

SUERO FACIAL 5 en 1,  contiene ácido hialurónico,  niacinamida,  vitamina C, vitamina E y colágeno. Serum 5 en 1: mezcla de ingredientes sinérgicos de colágeno (5%) vitamina C (30%), niacinamida (5%), ácido hialurónico (10%), vitamina E (10%) e ingredientes nutritivos.

Fórmula a base de plantas: libre de aditivos sintéticos de color, fragancias y estabilizadores, botánicos activos dinámicos como vitamina C, niacinamida, ácido hialurónico, vitamina E se combinan en un suero suave y sedoso que se puede utilizar de día o de noche. Suero facial antienvejecimiento para la cara: suero súper fuerte diseñado para combatir los signos del envejecimiento. El uso regular genera una piel notablemente más suave, radiante y de aspecto más joven.

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SERUM 5 EN 1

SUERO FACIAL 5 en 1,  contiene ácido hialurónico,  niacinamida,  vitamina C, vitamina E y colágeno. Serum 5 en 1: mezcla de ingredientes sinérgicos de colágeno (5%) vitamina C (30%), niacinamida (5%), ácido hialurónico (10%), vitamina E (10%) e ingredientes nutritivos.

Fórmula a base de plantas: libre de aditivos sintéticos de color, fragancias y estabilizadores, botánicos activos dinámicos como vitamina C, niacinamida, ácido hialurónico, vitamina E se combinan en un suero suave y sedoso que se puede utilizar de día o de noche. Suero facial antienvejecimiento para la cara: suero súper fuerte diseñado para combatir los signos del envejecimiento. El uso regular genera una piel notablemente más suave, radiante y de aspecto más joven.

 ÁCIDO HIALURÓNICO:

El ácido hialurónico es un hidrato de carbono natural, componente importante del tejido conjuntivo y con la capacidad de regular el nivel de hidratación de la piel. El ácido hialurónico es producido por el propio organismo y, por tanto, es de origen natural. Sin embargo, con la edad, las reservas de ácido hialurónico del propio organismo disminuyen, lo que se traduce en una menor elasticidad de la piel, arrugas e incluso sequedad cutánea, por este motivo, el ácido se utiliza desde hace muchos años como ingrediente para el cuidado de la piel para mantenerla tersa y radiante. El ácido hialurónico es un componente principal del tejido conjuntivo humano como bien dijimos anteriormente, que se encuentra entre las células de la piel. Su función es rellenarla y protegerla. El ácido hialurónico tiene la capacidad de ligar grandes cantidades de agua, por lo que también es responsable de la hidratación de la piel. El resultado es una piel firme y rellena. El ácido hialurónico es un auténtico todoterreno porque, como ya se ha mencionado, puede retener mil veces su propio peso en humedad. Así, ¡un gramo de ácido hialurónico puede almacenar unos 6 litros de agua! Esta capacidad lo convierte en uno de los ingredientes más populares en cremas y sueros. También ayuda a fortalecer la piel y a calmar las irritaciones. De este modo, regenera las capas superiores de la piel y le da un aspecto suave y radiante. Dado que la producción de ácido hialurónico del propio organismo disminuye con la edad, también sirve como refuerzo antiedad y relleno de arrugas. Los expertos recomiendan aplicar el ácido hialurónico sobre la piel húmeda para que ésta lo absorba de forma óptima.

 

NIACINAMIDA:

La niacinamida, también conocida como nicotinamida o vitamina B3, es una vitamina B hidrosoluble que desempeña un papel fundamental en tus funciones corporales vitales, como por ejemplo en la digestión y en la función cerebral; y por supuesto, es muy importante para la piel. Podemos enumerar varios beneficios como: restaura la barrera protectora de la piel, construyendo proteínas en la piel y bloquea la humedad para mantener los factores de estrés ambiental, como la contaminación y los rayos UV, fuera de ella (importante: utilízala siempre con protector solar para conseguir mejores resultados).

Antienvejecimiento: ayuda al cuerpo a construir queratina (una proteína que mantiene la piel firme y joven), y es útil para reducir algunos signos de envejecimiento como las líneas de expresión, arrugas, la decoloración de la piel.

Reduce la hiperpigmentación.

Potencia la luminosidad de la piel reduciendo la producción de melanina, que es la causante de las manchas oscuras.

También tiene un efecto antiinflamatorio, que puede ayudar a aliviar el enrojecimiento de algunas inflamaciones de la piel.

Ayuda a aliviar los síntomas del acné: puede contribuir a regular la cantidad de grasa que producen las glándulas sebáceas, evitando que se disparen. El exceso de grasa y las células muertas de la piel pueden bloquear los poros, y esta acumulación favorece el crecimiento bacteriano, que a su vez provoca la aparición de manchas.

 

VITAMINA C:

La vitamina C es una vitamina hidrosoluble. Es necesaria para el crecimiento y desarrollo normales. Las cantidades sobrantes de la vitamina salen del cuerpo a través de la orina. Aunque el cuerpo guarde una pequeña reserva de estas vitaminas, se tienen que tomar regularmente para evitar una escasez en el cuerpo. Se utiliza para: formar una proteína importante llamada colágeno, utilizada para producir la piel, los tendones, los ligamentos y los vasos sanguíneos. Sanar heridas y formar tejido cicatricial. Reparar y mantener el cartílago, los huesos y los dientes. Ayudar a la absorción del hierro.

La vitamina C es uno de muchos antioxidantes. Los antioxidantes son nutrientes que bloquean parte del daño causado por los radicales libres. Los radicales libres se producen cuando el cuerpo descompone el alimento o cuando usted está expuesto al humo del tabaco o a la radiación. La acumulación de radicales libres con el tiempo es ampliamente responsable del proceso de envejecimiento. El cuerpo no puede producir la vitamina C por sí solo, ni tampoco la almacena. Por lo tanto, es importante incluir muchos alimentos que contengan esta vitamina en la dieta diaria, como por ejemplo: melón cantalupo. Frutas y jugos de cítricos, como las naranjas y toronjas (pomelos), kiwi, mango, papaya, piña, fresas, frambuesas, moras y arándanos, sandía o melón.

Las verduras que son las mayores fuentes de vitamina C incluyen: brócoli, coles de bruselas y coliflor. Pimientos rojos y verdes. Espinaca, repollo, nabos verdes y otras verduras de hoja. Papa o patata blanca y la dulce (camote). Tomates y su jugo. Cidrayote

Consumir estos alimentos sólo refuerza nuestro sistema inmunológico y todos los beneficios ya detallado,  sino que le devuelve vida y lozanía a nuestra piel.

 

VITAMINA E:

La vitamina E, perteneciente al grupo liposoluble, se presenta en 8 diferentes formas llamadas tocoferoles y tocotrienoles. Cada forma tiene su actividad biológica propia. La forma más eficaz de la vitamina E es la alfa tocoferol. Se puede encontrar en alimentos, en cápsulas para su consumo o en productos estéticos. Tanto la bilis como las enzimas pancreáticas son esenciales para su absorción. Se deposita lentamente en hígado, músculo y principalmente en el tejido adiposo. Es importante saber que la vitamina E no es destruida por la cocción. Su destrucción se ve favorecida ante grasas poliinsaturadas, la exposición a la luz, las frituras y ante el oxígeno. Son numerosos los productos estéticos que contienen vitamina E por sus propiedades antiinflamatorias y tonificantes para la piel y el rostro. Puedes ayudarte consumiendo  alimentos que pueden aportar vitamina E como principalmente la yema de huevo, aceites vegetales germinales (soja, cacahuate, arroz, algodón y coco), vegetales de hojas verdes, cereales, panes integrales y almendras. Además, dado que su presencia elimina sustancias tóxicas, ayuda a remover las ingresadas al organismo por los fumadores.

La vitamina E es un potente antioxidante natural que reacciona con radicales libres solubles en lípidos de la membrana celular. De esta forma mantiene la integridad de la misma dando protección a las células ante la presencia de compuestos tóxicos, metales pesados (plata, mercurio, plomo), drogas y radiaciones. La toxicidad de estas sustancias extrañas está dada por los radicales libres que se generan durante la detoxificación (desintoxicación) del organismo.

La vitamina E protege al organismo contra los efectos del envejecimiento eliminando los radicales libres que causan degeneración de los tejidos como la piel y vasos sanguíneos. También protege contra los efectos mentales del envejecimiento como la pérdida de memoria.

 

COLÁGENO:

El colágeno es la proteína más abundante de todos los vertebrados. Se calcula que 1 de cada 4 proteínas es colágeno, y que un 7% de la masa corporal está formada por ella. Esto se debe a que es el componente principal del tejido conectivo de varias zonas del cuerpo, en especial en los huesos, las articulaciones y la piel. Por otro lado, si recordamos que el 25% de las proteínas que forman nuestro cuerpo son de colágeno, podemos ver que en los tendones y en los huesos estas concentraciones llegan a suponer el 90% de su peso en seco. Al estar presente en tantas zonas diferentes de nuestro cuerpo, 42 genes se encargan de que adopte la misma forma en los órganos donde está presente. Además, hay 28 clases distintas de colágeno, que son moldeados por esta cadena de genes para que se adapten a su medio. Es de esta manera cómo el colágeno puede ser más frágil y flexible como en la piel, o duro y robusto, como en los huesos.

Lamentablemente, la producción de colágeno empieza a descender con los años, a partir de los 20 años, el cuerpo empieza a producir menores cantidades de colágeno. Esto llega a ocurrir a un ritmo de 1% menos de colágeno cada año. También se empieza a producir menos elastina, de modo que podemos ver cómo empieza a incidir en la salud de nuestra piel, de manera progresiva, pero visible.

El colágeno le da resistencia, flexibilidad y consistencia a nuestra piel.

La piel sufre cambios degenerativos al envejecer, que consisten en pérdida de elasticidad, reducción del grosor de la epidermis y del contenido de colágeno, degeneración de las fibras elásticas y el aumento de arrugas y sequedad. Además, después de la menopausia la piel se ve más perjudicada por la aceleración del proceso de envejecimiento. Se ha comprobado  la capacidad del colágeno para reparar el daño en la piel, mejorando su salud y apariencia.

Todos estos ingredientes hacen de este producto una acertada y magnífica elección.

 

INDICACIONES:

Lavar la cara y luego poner en la yema de los dedos unas 2 a 3 gotas del sérum facial 5 en 1, aplicar suavemente en forma ascendente y de adentro hacia afuera.

Perfecto para todos los tipos de piel: el suero facial 5 en 1 es el más adecuado para todos los tipos de piel, incluyendo aquellos con piel seca, grasa, propensa al acné y sensible.

CONTRAINDICACIONES

Suspenda su uso si hace reacción a algunos de sus componentes.

Referencias específicas